Hay eventos que refieren al mítico Burning Man manteniendo sus principios y construyendo una ciudad temporal que se construye (y destruye) cada año fomentando especialmente la expresión radical y las obras artísticas que proponen sus habitantes.
En su versión 2023 propusimos la experiencia del taller de Proyecto Batea con materiales adaptados a condiciones extremas de esta ciudad temporal.
Y fue maravilloso, por los participantes de esta comunidad que siempre están dispuestos a experimentar y colaborar, y también porque encontramos el modo de llevarlo a cabo con actividades colectivas asociadas a algunos principios del evento, como la desmercantilización y la economía del regalo a través de la participación. Cada uno regaló una obra en un género que también regalamos para que la instalación site-specific los haga sonar.
Estos materiales alternativos crearon momentos de una hermosa coreografía instantánea que, de paso, se asocia a la inmediatez.
En 2023 construimos una versión de la instalación con una narrativa alternativa a la del vinilo para que funcione en condiciones realmente austeras en cuanto a la disponibilidad de energía y a la vulnerabilidad de la obra sujeta casi a condiciones de intemperie.
Esto implica también el ensayo de materiales e insumos compatibles con el contexto y con las condiciones que podemos explotar para la generación del sonido.